¿Y si tener coche ya no fuera necesario? Bienvenidos a la era del coche “bajo demanda”
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Durante años, tener coche era casi como tener un perro: compromiso a largo plazo, mantenimiento, y esa sensación de que te miran raro si no tienes uno. Pero hoy, con el tráfico, los costes y la vida cada vez más flexible, muchas personas se preguntan: ¿Realmente necesito comprar un coche?
Spoiler: no. Y aquí viene lo interesante.
Ahora puedes conducir sin tener que hipotecarte emocional (ni económicamente) con un vehículo. ¿Cómo? A través de fórmulas como el renting, carsharing, leasing o la suscripción. Son alternativas distintas, pero todas apuntan al mismo sitio: usar el coche solo cuando lo necesitas, sin pasar por caja para tenerlo en propiedad.
Renting: para quienes quieren comodidad sin líos
Piensa en el renting como un “Netflix de coches”. Pagas una cuota fija al mes y te olvidas de todo: mantenimiento, seguro, impuestos… hasta el cambio de neumáticos si hace falta. Es ideal para quien necesita un coche a medio o largo plazo (normalmente entre 2 y 5 años), pero sin las complicaciones de ser propietario.
¿Ventajas? Muchas: no hay entrada, los costes son previsibles y cambiar de coche al final del contrato es tan fácil como renovar un móvil. ¿Pegas? No es tuyo, y si te bajas del barco antes de tiempo, hay penalización. Pero para quienes priorizan la comodidad, es un sí rotundo.
Carsharing: el coche a golpe de app
¿Te mueves por ciudad y solo necesitas coche para momentos puntuales? El carsharing es tu opción. Reservas desde el móvil, lo usas unas horas (o minutos) y lo devuelves. Como un patinete, pero con maletero y aire acondicionado.
Ideal para escapadas, mudanzas improvisadas o recoger esa estantería imposible de IKEA. Renault lo ofrece con Mobilize Share, una app donde eliges modelo, horario y estación de recogida.
Leasing: casi tuyo, pero todavía no
Aquí hablamos de un alquiler con intención. Es como un renting, pero con una opción final de compra. Al acabar el contrato, puedes quedarte con el coche pagando un importe previamente pactado.
Útil si aún dudas entre alquilar o comprar, o si eres autónomo y buscas ventajas fiscales. Renault ofrece esta opción con Mobilize Financial Services, pensando tanto en particulares como profesionales.
Suscripción: cambia de coche como de serie
La suscripción es la opción más libre: eliges coche, pagas cuota mensual, y puedes cambiar o cancelar con facilidad. Perfecta si hoy necesitas un SUV y mañana prefieres algo más compacto. Todo digital, sin entrada y con kilometraje flexible.
Bipi, por ejemplo, es la apuesta de Renault en este modelo, con opciones desde 6 hasta 36 meses.
